NAVE CENTRAL
Asombrados por la belleza de la decoración y las dimensiones armoniosas de esta capilla, entremos en su misterio.
Desde hace casi un siglo y medio, en esta capilla, la oración sube hacia el Señor.
Muchas celebraciones de Oblaciones se desarrollaron en este lugar.
Misas entre semana de la parroquia, las adoraciones del Santísimo Sacramento, las oraciones de diversos grupos, oficios de la comunidad religiosa continúan animando estas paredes cargadas de historia y de espiritualidad.
Orantes y turistas sienten, en este lugar la dimensión humana, una atmósfera particular de paz y de gracia donde Dios continúa revelando su amor.
Luisa Teresa de Montaignac, fundadora de las Oblatas del Corazón de Jesús, deseó que ésta capilla fuera consagrada a recordar el amor del Corazón de Jesús y hacerlo conocer mejor a través de los retiros y las obras. Veló por su realización.
Al principio la capilla únicamente estuvo constituida de la nave central. Construida entre 1862-1864 en el límite de las murallas y fosos de la ciudad, las paredes de la nave eran de color blanco con el fondo del vitral del Sagrado Corazón.